Condenado un hombre de 45 años por matar a su madre después de que le pinchara su muñeca hinchableSEVILLA.- Un hombre de 45 años ha aceptado una condena de 20 años de reclusión en el Hospital Psiquiátrico Penitenciario por matar a su madre a puñaladas después de que ésta le pinchase la muñeca hinchable con la que estaba viendo una película pornográfica.
El juicio debía comenzar este viernes ante un jurado popular pero no llegó a celebrarse porque el acusado aceptó los hechos y la condena, que incluye el pago de una indemnización de 27.000 euros a tres hermanas de su madre.
Por su parte, la acusación particular que ejercían las hermanas de la fallecida retiró su anterior petición de 20 años de cárcel por un delito de asesinato, en el que no aceptaba que el procesado padeciese ningún trastorno mental que le eximiese de conocer la gravedad de su actuación.
El homicidio ocurrió en la noche del 11 de julio de 2003, cuando el acusado M.R.M. se encontraba en el salón de su casa viendo una película pornográfica e inició una discusión con su madre, mujer "de fuertes convicciones religiosas".
Según el fiscal, la madre, A.M.F., de 68 años, le recriminó su comportamiento y le pinchó la muñeca, tras lo cual el acusado se dirigió a la cocina, tiró la muñeca al cubo de la basura y cogió un cuchillo, con el que apuñaló a su madre.
En total la víctima recibió 61 puñaladas, la mayor parte de ellas superficiales que su hijo le fue dando "con ánimo de maltratarla y hacerla sufrir", según el fiscal, ya que ninguna afectó a órganos vitales.
Finalmente la mujer se dirigió al balcón con intención de pedir auxilio y en ese momento el procesado le asestó un corte mortal en el cuello que le produjo una hemorragia aguda y el fallecimiento al instante. Según el escrito de acusación, el procesado mantenía "fuertes discusiones" con su madre provocadas por sus "manifestaciones sexuales" ya que "se había refugiado en la pornografía". Fuentes judiciales han explicado que ahora la familia de la víctima cobrará las indemnizaciones gracias a los ahorros y el piso propiedad de la fallecida, ya que su hijo será posiblemente desheredado por el juez al haber sido su asesino.
Tras cometer el parricidio, el procesado huyó de Sevilla y se escondió en Medio Cuyedo (Cantabria), donde fue detenido el 22 de julio.